Pues... ¿qué son unas pocas horas de estudio, tiempo en el campamento y algo de seguimiento?
Supongamos que te inscribes para ser capacitado como guía. Practicas actividades para desarrollar ciertas habilidades que te servirán en el campamento, memorizas versículos de la Biblia, aprendes evangelismo básico y vas al campamento. Tal vez impactes la vida de alguien, pero tal vez el voluntariado cambie más tu vida que la del explorador.
Toma en cuenta la historia de David
“Yo no estaba buscando trabajar en el ministerio de campamento, el campamento me encontró me encontró a mí. En realidad, fue mi papá quien me ofreció como voluntario. Yo podría haber dicho que no, pero ir al campamento para ayudar como guía sonaba mucho más divertido que trabajar en el negocio familiar.
“Durante mi primera noche en el campamento me sentía muy nervioso. Tenía que dar un estudio bíblico sencillo a los niños pequeños en mi cabaña. Probablemente eran 10 o 12 años más jóvenes que yo; tenían solo ocho años. Sin embargo, yo estaba más enfocado en mi que en buscar ayudarlos.
“Para el final del campamento yo era una persona totalmente diferente. Los exploradores se habían encontrado con Dios, y yo también. Habían aceptado a Cristo y yo había aceptado el hecho de que Dios me había usado para ayudar a que eso sucediera. Por supuesto, el Espíritu Santo también estuvo trabajando. Pero nunca olvidé que, por muy poco que supiera sobre campamentos, Dios podía usarme para ministrar a otros”.